Son aquellos documentos que se utilizan cuando se quiere notificar algo a determinada persona y que no haya duda de que el destinatario ha recibido personalmente el contenido de la notificación. En estos caso el Notario debe ir personalmente a entregar la notificación al notificado.

A veces no sólo se le notifica y algo, sino que se le requiere para que haga algo. Por ejemplo, para que entregue unas llaves, para que pague unas cantidades, para que cumpla un contrato…

De este modo queda acreditado fehacientemente esa notificación.